«Carmen y Lola es capaz de mostrar la cruda realidad del universo gitano, y a la vez la ternura y el respeto que en ocasiones se da en él»
El amor está presente. Siempre. A veces desde que nacemos, a veces desde que nos damos cuenta de que existe. Y, en gran medida, es lo que nos viene a contar la historia de Carmen y Lola. Arantxa Echevarría ha traído a nuestras pantallas una historia tierna, conmovedora, de aquellas que evocan las sensaciones que tuvimos durante nuestro primer amor. Una historia con tintes almodovarianos, tan bonita como desgarradora debido al contexto en el que se desarrolla.
Lola (interpretada por una gran Zaira Morales) es una chica gitana de 16 años que tiene muy clara su sexualidad. Es lesbiana, y ha aprendido a aceptarse como tal pese a pertenecer a un ámbito social en el que su condición está concebida prácticamente como un sacrilegio. Carmen, por su parte, es una ‘mujer’ de 17 que está a punto de afrontar su pedida con Rafa, el primo de Lola. Decidida a comprometerse con el amor de su vida, Carmen conocerá a Lola en el mercadillo donde sus familias trabajan.
El conflicto que Carmen tiene consigo misma aúna la tradición de su etnia y el rechazo de la misma hacia la tendencia homosexual.
La primera mirada de Lola a Carmen lo dice todo. Esta última, empapada bajo la lluvia, se acerca al puesto de la familia de Lola a pedir unos plásticos que cubran la mercancía de su puesto para evitar que se estropee. Y justo en ese momento es cuando podemos darnos cuenta de que a Lola le basta con esa mirada primera, con una caricia naif, para enamorarse. Poco a poco irán construyendo una relación que para Carmen está basada en la amistad. Pero todo cambia poco después.
Lo más interesante de Carmen y Lola es que va más allá de la tierna historia de amor que narra. La cinta es transgresora por emplazar una situación de homosexualidad en un espacio como es el mundo gitano. El conflicto que Carmen tiene consigo misma aúna la tradición de su etnia y el rechazo de la misma hacia la tendencia homosexual. Pero qué agradable resulta contemplar una historia en la que lo que importa es el amor, venga de donde venga.
Este universo gitano es arcaico, pero está muy bien tratado por Echevarría en la dirección, que es capaz de mostrar la cruda realidad que lo compone y a la vez la ternura y el respeto que en ocasiones se da en éste. Cuenta para la película con actores en su mayoría noveles, gitanos que se mueven como pez en el agua en un entorno como el de esta Carmen y Lola. La forma de hablar, los ritos y tradiciones se mezclan hasta el punto de mostrar al espectador este mundo como lo que es, algo cercano y que existe a día de hoy. Con connotaciones negativas, pero también con ternura y cariño.
Cuenta para la película con actores en su mayoría noveles, gitanos que se mueven como pez en el agua en un entorno como el de esta Carmen y Lola.
Es bonito darse cuenta de cómo en la pedida, quienes tienen ‘la última palabra’ no son los padres de los novios como cabría esperar, sino los propios novios. Es bonito ver como una madre se preocupa por su hija pese a estar decepcionada con su condición sexual y su propio padre la rechace (mención aparte para el papel de Moreno Borja, poderoso y tajante). También es bonito recibir una carta de amor y contestarla, aprender a nadar o fantasear con ir al mar buscando la libertad. Todos hemos vivido eso, y es esa cercanía la que nos hace empatizar con las protagonistas.
Son lugares comunes, sí, pero en este caso ofrecen al espectador un prisma diferente. Una situación que, posiblemente, se haya silenciado a lo largo de los años. Un viaje a la España de los 60 en pleno 2018. Habitar esa orbe de tradiciones obsoletas pasa factura, eso sí. La película nos lo hace ver así en ese magnífico plano abierto de las casas de El Ruedo, que se convierten en pequeñas celdas de las que ni Carmen ni Lola pueden escapar. Como si estuvieran encerradas en una cárcel presas de su condición sexual.
Pero el amor debe prevalecer. Y en Carmen y Lola, prevalece. Vaya si lo hace.
Sinopsis Carmen, como cualquier otra gitana, está destinada a vivir una vida que se repite generación tras generación: casarse y criar a tantos niños como sea posible. Pero un día conoce a Lola, una gitana poco común que sueña con ir a la universidad, dibuja graffitis de pájaros y es diferente.
País España
Dirección Arantxa Echevarria
Guion Arantxa Echevarria
Música Nina Aranda
Fotografía Pilar Sánchez Díaz
Reparto Zaira Morales, Rosy Rodriguez, Moreno Borja, Carolina Yuste, Rafaela León
Género Romance
Duración 103 min.
Título original Carmen y Lola
Estreno 07/09/2018