Mia y el león blanco (2018) de Gilles de Maistre – Crítica

Mia y el león blanco

«Mia y el león blanco transmite sensibilidad, firmeza y denuncia a partes iguales»

Guilles de Maistre introduce al espectador en una granja-reserva de África con una presentación estándar de Mia: una niña de ciudad, criada en pleno Londres y adherida a un ambiente al que le cuesta adaptarse. Mia es una chica de unos once o doce años, rebelde, que no quiere vivir en una casa de madera entre leones, sino volver a su entorno de asfalto y hormigón.

Su vida comienza a cambiar cuando nace Charlie, un león blanco de enorme belleza. Alice y John —sus padres— deciden no poner límites a la relación entre la chica y el león, y en este vínculo de amor incondicional, Mía se hará cargo de todos sus cuidados, llegando incluso a compartir cama con la “bestia” blanca.

Es una clara alusión a la falta de ética humana, denunciando la realidad de las cacerías en las granjas Africanas.

Cuando Charlie se hace mayor los problemas se acrecientan; la percepción de que Mia no está midiendo las consecuencias llevan a sus padres a replantear venderlo o encerrarlo sin permitir que la niña se acerque al animal. Pero la indomable Mia y su amor por Charlie complicará, a su vez, la relación con ellos. Un punto de giro argumental será el inicio del segundo bloque de la película, una persecución que baila entre la fantasía, el humor, y la música.

Mia y el león blanco es una clara alusión a la falta de ética humana, denunciando la realidad de las cacerías en las granjas Africanas.

Es una película que no se distingue por su capacidad técnica, ni por unas interpretaciones sobresalientes. Tampoco será recordada por mucho tiempo, sin embargo, puedo decir que es maravillosamente entretenida, no le falta ni le sobra nada. Nacida de una idea extraordinaria como grabar durante dos años a una niña con un león para permitir que su crecimiento se viera reflejado, transmite sensibilidad, firmeza y denuncia a partes iguales. Un equilibrio perfecto que hacen de Mia y el león blanco un reflejo de lo que somos, de lo que no soportamos, de nuestras contradicciones, deseos y rupturas.

La película nos recuerda la importancia de la educación a nuestros menores.

No se trata únicamente de salvar el planeta de las insensibles manos de una civilización que se autodestruye, que también. Sino que, al menos desde una perspectiva pedagógica, Mia y el león blanco nos recuerda la importancia de la educación a nuestros menores. En este caso, la relación entre Mia y el león no tiene límites, y esa pérdida de limitación se vuelve en contra cuando se construye la relación entre una adolescente y un león adulto.

Por otro lado, la educación que recibe Mia está fundamentada en la experiencia personal de su padre John. Sin embargo, las experiencias de uno solo le sirven a uno, no son aplicables a otros y, en este caso, Mia desarrolla un profundo lazo emocional con un animal salvaje, llevando la ideología animalista hasta su máximo exponente: todos los animales son seres sintientes, no son propiedad de nadie.


Sinopsis Una joven que se ha trasladado con sus padres desde Londres a África desarrolla un vínculo sorprendente y especial con un león salvaje. Su increíble amistad la impulsa a viajar por la sabana para salvar a su mejor amigo.
País Francia
Dirección Gilles de Maistre
Guion Prune de Maistre y William Davies
Música Armand Amar
Fotografía Brendan Barnes
Reparto Daniah De Villiers, Mélanie Laurent, Langley Kirkwood, Ryan Mac Lennan, Lionel Newton, Lillian Dube, Brandon Auret
Género Drama
Duración 98 min.
Título original Mia et le lion blanc
Estreno 12/04/2019

Calificación7
7

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Santiago Jurado

Natal de Madrid (1984). Pedagogo, Dromomaníaco y coordinador de Proyectos educativos. Interesado en las herramientas visuales como agente didáctico en las aulas. Estudié guión de cine en Fuentetaja Literaria y diseño con 3DStudio Max en el centro Nuevas Tecnologías de Madrid. Practicante de Yoga, Mindfulness y Senderismo. Adoro los movimientos contraculturales, la escritura no lineal, el baile improvisado y la naturaleza salvaje.

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