Hay varias películas que han marcado nuestra infancia y es posible que ‘Los Goonies‘ (The Goonies, 1985) no sea una de las primeras que nos vienen a la cabeza. Sin embargo, el simple hecho de mencionarla hace que nos invada un ataque de nostalgia, se nos dibuje una sonrisa, e incluso nos atreveríamos a decir que nos convertimos en mejores personas.
‘Los Goonies‘ es una de las películas que formaron parte de una especie de sub-género cinematográfico que se puede llamar “cine de grupos de amigos” (nos lo acabamos de inventar) y que el mismo año, 1985, tuvo su equivalente adolescente en ‘El Club de los Cinco‘ (The Breakfast Club, 1985).
Dos años antes de que se estrenasen ‘Los Goonies‘, Francis Ford Coppola llevó a la gran pantalla, con otro reparto memorable, la clásica novela de S.E. Hinton ‘Rebeldes‘, un pilar fundamental para el género. En un tono más infantil y edulcorado, la historia escrita por Steven Spielberg abría la veda para que llegasen otros títulos como ‘Cuenta conmigo‘ (Stand by Me, 1986) o la fantástica ‘Jóvenes Ocultos‘ (The Lost Boys, 1987).
El legado de estas películas sigue vigente hoy, e incluso ha habido intentos recientes de resucitar este sub-género que nos acabamos de inventar. J.J. Abrahams, con la producción de Spielberg, hacía un claro homenaje con ‘Super 8‘ (2011) y, de una forma más modesta, ‘El hijo de Rambow‘ (Son of Rambow), del británico Garth Jennings, hacia lo propio en 2007.
Esta entrañable aventura de monstruos y piratas está plagada de anécdotas y curiosidades. Algunas de las historias que se cuentan sobre esta película “marca Spielberg” aunque dirigida por Richard Donner (‘Superman‘, ‘La Profecía‘ o ‘Arma Letal‘), hablan de cómo uno de los niños acudió al rodaje con varicela por miedo a perder su papel; de cómo se hacen guiños a otras películas con la camiseta de Superman de Sloth (el “monstruo”) o con la figura medio escondida en el barco pirata de R2D2 de ‘La Guerra de las Galaxias‘ (Spielberg venía de trabajar con George Lucas en ‘Indiana Jones y el Templo Maldito‘); o de cómo muchos de los padres que aparecen en la película eran, en realidad, los progenitores verdaderos de los niños, lo cual no es de extrañar porque muchos de ellos vienen de familias de actores.
Hay mucho que contar acerca de esta obra sencilla y eterna pero queremos reflexionar sobre el paso del tiempo, sobre esos treinta años que han convertido a sus pequeños protagonistas en unos cuarentones. Aún a riesgo de parecer un poco cotillas, nos causa mucha curiosidad saber qué ha sido de esos niños que casi llegaron a formar parte de nuestras propias pandillas.
Empezamos por Sean Astin, visto ahora, el que probablemente más éxito haya tenido. Se hizo archiconocido como Sam, el inseparable amigo de Frodo en la saga de ‘El Señor de los Anillos‘ pero podemos decir que su carrera ha sido bastante constante en general.
Aún así, Astin es un hombre de múltiples talentos y ha tenido tiempo para hacer muchas otras cosas. Casado y padre de familia desde 1994, tiene dos carreras universitarias con honores en UCLA y destaca en otras actividades como el póquer; tras desaparecer de la serie de televisión ‘The Strain‘, su último trabajo más conocido, se le ha podido ver en el European Poker Tour de Mónaco, un prestigioso torneo profesional donde participan los mejores jugadores del mundo.
Sean Astin tiene varias cosas en común con otro de los protagonistas de ‘Los Goonies‘: Josh Brolin. Para ambos fue su primera película, y después vivieron momentos en los que parecían medio desaparecidos hasta que en los últimos años les han llegado sus grandes éxitos.
Los dos vienen de una familia de intérpretes. Mientras que Astin es hijo de la actriz Patty Duke, que tuvo su propio show en los años 60, e hijo adoptivo de John Astin, conocido principalmente por ser Gomez Addams de la serie de televisión ‘La familia Addams‘, Brolin es hijo de James Brolin, muy famoso por la serie ‘Hotel‘.
El actor nominado al Oscar por ‘Milk‘ (2008) no se ha dejado seducir por los naipes como su compañero de reparto, pero sí por la Bolsa de valores, hasta el punto de plantearse dejar la actuación para ser trader a tiempo completo. Otra de sus aficiones son las carreras de coches, llegando a ganar el Toyota Grand Prix of Long Beach 22 años después de que lo hiciera su padre.
Pese a que ella no debutó con ‘Los Goonies‘, Martha Plimpton (la de las gafas) también ha tenido una carrera más o menos constante en la interpretación, con títulos memorables como ‘Beautiful Girls‘ (1996) o ‘Yo Disparé a Andy Warhol‘ (I Shot Andy Warhol, 1996), y proviene de una familia de actores. La hija de Keith Carradine, sobrina del malogrado David y nieta de John, fue uno de los rostros de los 80, además de por ‘Los Goonies‘, por otras cintas como ‘La Costa de los Mosquitos‘ (1986), una de las películas donde coincidía con el que fue su novio, River Phoenix. Hoy en día se dedica más a la televisión y a otros proyectos como 52nd Street Project, que utiliza el teatro para trabajar con niños con pocos recursos económicos.
Menos éxito ha tenido la carrera de Corey Feldman, aunque tampoco ha parado de trabajar en la industria. Otro icono adolescente de los 80, aparecía también en ‘Jóvenes Ocultos‘ junto al fallecido Corey Haim, conocidos en aquellos tiempos como “The Two Coreys”. De hecho, años más tarde, en 2007-2008, protagonizaron un reality show con ese nombre en el que Haim se mudaba a casa de Feldman y su novia. Duró dos temporadas.
Feldman sigue en la brecha y uno de sus trabajos más estables es como doblador de ‘Las Tortugas Ninja‘ donde, casualidad o no, también participa Sean Astin.
El resto del reparto principal de ‘Los Goonies‘ está alejado de los focos. Jonathan Ke Quan, que también recordamos por ser el niño gritón de ‘Indiana Jones y el Templo Maldito‘ (Indiana Jones and the Temple of Doom, 1984), sigue trabajando en películas pero como coreógrafo de peleas de artes marciales. Kerri Green, una de las “novias” de los 80, siguió haciendo películas tras su debut pero se fue centrando en la vida familiar y, aunque escribe guiones, está bastante apartada de la vida pública. Quien abandonó el cine por completo es Jeff Cohen, el “gordito” de ‘Los Goonies‘ (y el que fue al rodaje con varicela), quien hoy en día está irreconocible y se dedica a la abogacía. 30 años dan para mucho.