Lars Von Trier, polémico y aclamado director de cine danés, ha concedido una entrevista al diario Politiken, donde ha confesado haber consumido drogas para escribir sus películas, y que ahora, tras desintoxicarse, no sabe si podrá seguir haciendo cine.
Desde ‘Rompiendo las olas (Breaking the Waves)’ en 1996, ha recurrido a una botella de vodka diario y una droga euforizante para escribir.
«No sé si podré hacer más películas, y eso me atormenta. Porque ¿qué voy hacer si no?». Teme que sus películas, sin la ayuda del alcohol y las drogas no sean lo suficientemente buenas.
Su última película, ‘Nymphomaniac’, la escribió sobrio, y tardo año y medio en hacerlo. ‘Dogville’, por ejemplo, apenas le costó 12 días.
Von Trier asegura que el alcohol es la mejor droga del mundo y que la ha usado habitualmente contra los miedos estúpidos que surgen todo el tiempo. Aunque a largo plazo su efecto es negativo.
«Ninguna expresión creativa con valor artístico ha sido creada nunca por ex alcohólicos o ex drogadictos», afirma.
A pesar de todo esto, Von Trier está meditando la idea de rodar una serie de televisión, pero de momento sólo tiene el título: ‘The House that Jack Built’.