Sin duda alguna, el Festival de Cine de Barcelona, sigue en plena forma. Hoy, media hora antes de lo habitual, se ha presentado en la Sección Oficial, una nueva premiere española. Esta vez se trataba de la cinta japonesa Nagasaki: Recuerdos de mi hijo (2016), del director Yôji Yamada, cuyos trabajos más destacados han sido los dramas Kabei: nuestra madre (2008), Una familia de Tokio (2013) y La casa del tejado rojo (2014). Con un espectacular casting encabezado por Kazunari Ninomiya (Gantz, 2011), Sayuri Yoshinaga (Buda: el gran viaje, 2011), Haru Kuroki (La casa del tejado rojo, 2014) y Tadannobu Asano (Parásito. Parte 1, 2014); Yamada ha contado además, con otro grande del cine japonés para componer la banda sonora, Ryuichi Sakamoto, que ha trabajado con grandes directores como Bernardo Bertolucci (El último emperador, 1987), Nagisa Oshima (Feliz Navidad Mr. Lawrence, 1983), Volker Schlondorff (El cuento de la doncella, 1990), Peter Konsminsky (Cumbres borrascosas, 1992), Brian De Palma (Snake Eyes, 1998), Abel Ferrara (New Rose Hotel, 1998) y Alejandro G. Iñárritu (Babel, 2006; El renacido, 2015).
El guion, del propio Yôji Yamada y Emiko Hiramatsu funciona a la perfección en una película que gira en torno a la trágica pérdida de un ser querido y la búsqueda de la felicidad de los que sobreviven. Les haré una breve sinopsis: Han pasado 10 años del final de la Segunda Guerra Mundial, y Japón aún se recupera de las heridas a causa de la bomba nuclear sobre Nagasaki. Nobuko (Sayuri Yoshinaga), una mujer de mediana edad, está decidida a seguir adelante mientras contempla la tumba de su hijo. Pero todo cambiará el día en que, al volver a casa, encuentra su hijo Koji (Kazunari Ninomiya) esperándola. Como si de un milagro se tratase, Koji volverá a manudo a visitar a su madre para poder recordar juntos a la familia, la guerra, y el pasado.
Una maravillosa cinta de extremada ternura y sensibilidad.
Al mismo tiempo, en la Sección de Cinema Amb Gràcia, se pasaba el film hispano-argentino Casi leyendas (2017) del realizador Gabriel Nesci, y protagonizado por actores de la talla de Diego Peretti, Santiago Segura, Diego Torres y Claudia Fontán, entre otros.
La Sección Oficial continuaba con la cinta La casa de la esperanza (2017) de Niki Caro, un drama real basado durante la segunda guerra mundial interpretado por Jesicca Chastain, exactamente la misma que participó en su momento en El año más violento (J.C. Chandor, 2014), Interstellar (Christopher Nolan, 2014), La cumbre escarlata (Guillermo del Toro, 2015), o Marte (Ridley Scott, 2015). Entre el elenco de actores también aparecen: Daniel Buhl (Colonia, 2015; Una buena receta, 2015; La dama de oro, 2015; Alone in Berlin, 2016), Johan Heldenbergh (Swimsuit 46, 2011; Hasta la vista, 2011; Alabama Monroe, 2012; La résistance de l´air, 2015), y Michael McElhatton (La autopsia de Jane Doe, 2016). La casa de la esperanza, tal vez, sea la cinta más floja que hemos visto hasta ahora a causa de la poca profundidad de los personajes, aunque brillan por su interpretación. El guion escrito por Angela Workmanen es una historia apasionante: la del matrimonio Jan y Antonina Zabinski, directores del zoo de Varsovia, que ayudaron a salvar a cientos de personas (y también muchos animales del zoo) de los nazis, tras la invasión de Polonia por las tropas alemanas en setiembre de 1939. Para definirla un poco mejor: es una película poderosa, con buena fotografía, vestuario, una sublime interpretación, pero que tiene algunas carencias de guion. ¿Por qué hemos dicho tal vez? Nos hallamos inmersos en una vorágine de buen cine y de altísima calidad cinematográfica, y ni público ni prensa se atreve a apostar por la película ganadora del certamen. El más mínimo fallo se hace notar de una forma escandalosa. ¿La casa de la esperanza es una película mala? En absoluto. Hemos dicho que tiene un fallo en el guion, y es el de hacer los personajes sin las complejidades que acarrea una invasión nazi. Nada más. El listón sigue estando muy alto y, para mañana nos espera un duro trabajo.
