‘El viaje de tu vida (Tracks)’ narra la historia real de Robyn Davidson, una mujer que se empeñó en recorrer andando una gran parte del territorio australiano. Sin tener apenas experiencia en este tipo de desafíos, atravesó 3.200 kilómetros de desierto, acompañada tan solo de su perro y cuatro camellos. National Geographic financió su viaje y tomó fotografías, mostrando al mundo la hazaña. Tiempo después, la propia Robyn Davidson, relató su viaje en el bestseller ‘Huellas en el desierto (Tracks)’.

Un material jugoso para la industria cinematográfica, que sin embargo ha tardado más de 30 años en realizar una película (fue en 1977 cuando Robyn completó su periplo). Hoy, por fin, se estrena ‘El viaje de tu vida’, una curiosa película que trata semejante aventura de una forma tan poco épica, que retrata un personaje soñador de una manera tan poco idealista, que desconcierta, y decepcionará a más de uno.

El idílico escenario que la protagonista imagina, caminando por el desierto en absoluta soledad, totalmente apartada del mundo más civilizado, estalla con el sonido de las ruedas de un coche. El del fotógrafo de la famosa revista, quien deberá registrar en su cámara el viaje, destruyendo la pureza del desafío, y la naturalidad del mismo.

Los paisajes son preciosos, captados de forma muy bella por la excelente fotografía de Mandy Walker. Sin embargo, al igual que paso en la reciente ‘Locke (Steven Knight, 2013)’, el verdadero viaje del personaje principal se realiza en su interior. Pero a quien esto del «viaje interior» le suene a reflexiones explícitas sobre el género humano, búsqueda de respuestas sobre el famoso «¿de dónde venimos y a dónde vamos?», se encontrará muy lejos de entender la propuesta de la película.

‘El viaje de tu vida’ es un trabajo contemplativo en el que el espectador es testigo externo. Con unos pocos datos, debemos interpretar el carácter de la protagonista y la razón de su viaje. No se nos dan explicaciones más allá de unos cuantos flashbacks que no aportan demasiado y rompen con la propuesta del film.

No es una película superficial (dista mucho de serlo), pero las reflexiones, las ideas, los porqués tendremos que extraerlos nosotros mismos, porque no se nos entregan de forma manifiesta.

Por lo tanto, es esencial el tema del feeling, de la cercanía a lo que cuenta. Yo no necesité explicaciones a este sufrido viaje. ¿Quién no convertiría su vida en una aventura si el miedo y la pereza no nos ganasen la partida? Sólo se necesita valor y esfuerzo para hacer de tu tiempo algo especial. La protagonista se inicia en el nomadismo como vehículo de experimentación. Siempre en movimiento, buscando algo, forzando a la vida a que se exprese. Salir al mundo es vivir. Esperar en casa a que ocurra algo es morir.

Robyn Davidson pasó tres meses de su vida en pugna con un entorno árido y exigente, aunque quizá el resto del tiempo tuviera que enfrentarse a un mundo que ha perdido los valores y la privacidad.

Estamos, por tanto, ante un cambio en el estilo del director. John Curran olvida las narraciones repletas de frases más propias de la literatura, para componer una película mucho más visual, estéticamente muy bella, y en la que no puedo dejar de destacar el buen trabajo de Mia Wasikowska. Sin embargo, también nos encontramos con una barrera, quizá premeditada, y es la escasez de dramatismo y fuerza emocional.

Sinopsis Relata el viaje de una joven que en 1977 recorrió 3.200 kilómetros a través de los desiertos de Australia, acompañada por sus camellos y su perro.
País Australia
Director John Curran
Guión Marion Nelson
Fotografía Mandy Walker
Reparto Mia Wasikowska, Adam Driver, Emma Booth, Rainer Bock, Jessica Tovey, Robert Coleby, Tim Rogers, Melanie Zanetti, John Flaus, Lily Pearl, Philip Dodd, Daisy Walkabout, Felicity Steel, Ian Conway, Evan Casey, David Pearce, Darcy Crouch, Brendan MacLean, Jamie Timony, Ryan McMillan, Leah Michelle, Steven Parker
Productora Coproducción Australia-Reino Unido; See-Saw Films
Duración 107 min.
Género Aventuras
Título original Tracks
Estrenos 17/10/2014

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