Cortometraje Sonata

«Al mismo tiempo que Schiele y Balthus han sido censurados en Reino Unido y Alemania, llega a Madrid el festival de temática sexual La boca erótica, y… ¡nos deja boquiabiertos!»

Esto no es arte, es pornografía. El Reino Unido y Alemania censuran la obra de Egon Schiele mientras España no se corta, celebrando la 5ª edición de su Festival internacional de temática sexual, La Boca Erótica, dirigido profesional y cuidadosamente por Asiel Muñiz. ¡Enhorabuena!

Viejos, jóvenes, adultos, parejas, gente solitaria o acompañada, mujeres, familias, artistas, escritores, profesores, sexólogos y reporteros, acuden a este evento en el Círculo de las Artes de Madrid, encantados y sin ningún tipo de tapujos.

No podemos negar el erotismo. Quienes nos dedicamos al ARTE con mayúsculas, sabemos que ningún pintor puede renegar de los magistrales e incomparables trazos de Egon Schiele, y no defiendo a Balthus, mas permitiré a otros que lo hagan, pues cuando se habla de maestría, también se habla de gustos, aunque ello es secundario pues primero van la técnica, la composición y otros factores que convierten a una obra en superior.

En esta época en la que los dos pintores mencionados han sido censurados, nos llega a Madrid el festival de temática sexual La boca erótica, y ya su nombre… ¡nos deja boquiabiertos! Como cuando la hermosa actriz que reposa desnuda en la cama de un teatro, recibe un orgasmo. Pero no os preocupéis, esto no va de pornografía, va de erotismo, e incluso, de educación sexual que en ocasiones, ¡defiende la fidelidad!… por si estabais intrigados. Y como alguna vez escribiría Adolfo Sánchez Vázquez en su Invitación a la estética,  el arte no sólo es belleza, por si eso imaginábamos, sino grotesco, feo, sublime, trágico, cómico y por supuesto, y ¿por qué no? Erótico. ¿Quién que es, no es erótico?

En este festival se han presentado, charlas informativas, películas, documentales y cortometrajes. Haré hincapié en los últimos, cortos a concurso, y mencionaré que algunos han sido pequeñas obras de arte y su grandeza ha superado al tiempo, si nos referimos a minutos o a segundos, pues algunos como el titulado 69 sec (Bélgica), nos han mostrado en tan sólo 69 segundos, un diseño sutil y gracioso de erotismo.

No haremos referencia a los 29 cortometrajes presentados pues superaríamos los minutos requeridos de lectura convirtiendo un corto texto en uno largo, pero mencionaremos a algunos como Vampiro (España), en el cual podemos observar a una mente tóxica intentando chupar la energía de su víctima, quien inocente en su momento, no se da cuenta del engaño; así como la estudiante de un colegio en el cortometraje, Gólyatábor (Polonia) es agredida injustamente por su monitor y debe callar para no perder su beca; mientras otra se cree más lista en Hingsten (Suecia), logrando seducir al profesor como si se tratase de un caballo.

En O corpu Nu (Brasil), la fotografía de cuerpos desnudos de gente de la calle, nos recuerda a películas maravillosas como Blow Up, de Michellangelo Antonioni, pero sin su rigurosa estética, sino indagando a través de lo kitsch o lo grotesco como en The invisible (Venezuela) donde el/la protagonista nos muestra cómo hacer un corsé para los pobres;  y si nos referimos a fracasos, el experimento en The 36 Year old Virgin (Alemania) es tan caótico, que su mismo creador, protagonista y director, reconoce llorando al final del corto, que lo que ha logrado no es ni porno, ni estético, consiguiendo confundir a quien lo mira; afortunadamente en Etage X, también alemana, dos mujeres mayores nos hacen sonreír con su curioso ingenio, ¡encerradas en un ascensor!

El erotismo surge a mares y repito, ¿quién que es, no es erótico? La crema de distintos sabores en una pastelería y su delicada confitura nos muestran el erotismo en Pastry (UK), mientras El polinizador (España), es un hombre que trabaja inyectando solitario de manera erótica y dulce,  el polen de las abejas en las flores con el afán de salvar éste planeta y en sus horas de descanso, se enamora de los árboles; como en Botánica (Países Bajos), cuyos protagonistas intentan concebir un hijo entre hermosas flores y plantas de su invernadero, pero al no poder lograrlo, se consuman sin remedio, creando a una flor.

Hay cortos hermosos como Le clítoris (Francia) o El jardín de las delicias (México), en los cuales nos sentimos fascinados por tanta y tanta sencillez, colorido e inocencia y unos misteriosos que nos impactan por su estética oscura como Sonata, Scum o Phantasms of the living y nos remiten a películas como El Festín de Babette, La gran comilona de Marco Ferreri, Eyes Wide Shut de Stanley Kubrick o El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante de Peter Greenaway o nos recuerdan los carteles de Diseño gráfico oscuro, gótico y de terror polaco realizados por Wieslaw Walkuski. Y por si echábamos de menos a Goya, podemos encontrarlo en la estética de Next, pero esta vez… el majo no es maja y sí está desnudo.

En este festival hemos visto el erotismo realizado con estética antigua o moderna, con móviles e internet, con fruta, entre punks, con máscaras sangrientas o sin ellas; hemos visto carteles como los que tienen muchos jóvenes, ¡pero los hemos visto bailotear!; también hemos observado cómo un adolescente lucha desesperadamente por ser más atractivo en su gimnasio o cómo una vecina sin prejuicios, conquista a su vecino y se sube a su cama. Conflictos, alegrías, perversiones e incluso un toque de racismo casi imperceptible en Et ta Porstatate ça va? (Francia), se han dejado ver en un maratón de cine erótico, ¡en tan sólo dos días! viernes 9 y sábado 10 de febrero del 2018, misma semana de la censura de Egon Schiele en UK y Alemania.

De acuerdo, hemos sido un poco voyeristas y curiosos, como aquellos personajes en la magistral película, The Adjuster, 1991, del egipcio canadiense Atom Egoyan, uno de mis favoritos, pero aquí no había censura.

Película FLUIDØ

Programación:

9 de febrero:                                                            

10 de febrero: