«Los extraños: Cacería nocturna resulta efectiva como ejercicio de tensión y suspense, pero también destacable a la hora de ejecutar ciertos jumpscares que harán saltar a más de uno de su butaca»

Johannes Roberts se encarga de dirigir la secuela de Los Extraños (2008), un thriller terrorífico que dio mucho que hablar en su momento. Esta segunda parte se estrena sin hacer demasiado ruido y con un enfoque un tanto diferente. Si la primera película podemos calificar como una home invasion que podría recordar a grandes clásicos como Funny games o Inside. En esta ocasión, Cacería Nocturna tiene un enfoque mucho más cercano al slasher, con grandes persecuciones a campo abierto donde el espacio reducido de la casa es sustituido por un terrorífico camping abandonado.

Los extraños: Cacería nocturna resulta efectiva como ejercicio de tensión y suspense, pero también destacable a la hora de ejecutar ciertos jumpscares que harán saltar a más de uno de su butaca.

Esta secuela gana en violencia, por lo que los amantes del gore quedarán complacidos. Y, pese a que al principio pueda parecer que hay un intento por querer mantener el tono serio y angustioso de la primera parte, finalmente la película acaba por no tomarse demasiado en serio a sí misma, optando por un estilo mucho más macarra, absurdo, violento, propio de un slasher de serie B digno de una sesión nocturna de algún festival de género.

El reparto es acertado, aunque sus personajes no son especialmente memorables y funcionan más como carnaza que otra cosa. De hecho, la primera media hora resulta un tanto lenta debido a su enfoque más narrativo, centrado sobre todo en el conflicto de una adolescente (con los comportamientos típicos de la edad) con su familia y que no generan demasiado interés.

Los psycho-killers tampoco son especialmente carismáticos, más allá de sus terroríficas caretas, que pueden recordar a las que usaban los asesinos de The purge.

Es después de esta primera media hora cuando realmente comienza la diversión. El director rueda con pulso, generando un entretenimiento que no supone ninguna revolución dentro del género pero que cuenta con pequeños detalles estilísticos que le dan personalidad: una selección de temas clásicos de los 80 cada vez que está a punto de cometerse un asesinato o la ambientación de ese camping desolador, que acaba convirtiéndose en un personaje más de esta historia gracias a una destacable fotografía nocturna.

Habría que destacar también el apartado sonoro, con una BSO que es muy deudora de las películas de John Carpenter. Desde los créditos iniciales, la música evoca clásicos del género como Halloween.

En conclusión, Los Extraños: Cacería Nocturna puede resultar decepcionante para quien espere una secuela que recupere el tono opresivo, propio de un thriller, de la primera. No obstante, el fan del slasher, así como aquellos que busquen un buen entretenimiento con grandes persecuciones, elevada tensión y escenas gore, no le va a defraudar. Una secuela que opta por un enfoque diferente, decisión siempre arriesgada. Recomendada especialmente a los fans del género.

Sinopsis Cindy y Mike se embarcan en un viaje por carretera y planean pasar una temporada en un campamento de remolques antes de dejar a su problemática hija Kinsey en un internado. Pero el viaje se ve interrumpido por la llegada de tres psicópatas enmascarados que atacan y matan sin piedad.
País Estados Unidos
Dirección Johannes Roberts
Guion Bryan Bertino y Ben Ketai
Música Adrian Johnston
Fotografía Ryan Samul
Reparto Christina Hendricks, Bailee Madison, Martin Henderson, Lewis Pullman, Leah Roberts, Emma Bellomy, Damian Maffei, Lea Enslin, Preston Sadleir
Género Terror
Duración 85 min.
Título original The Strangers: Prey at Night
Estreno 01/06/2018