Las películas que a continuación se presentan constituyen una selección de las obras más destacadas estrenadas en España, en cines o plataformas, este año. Aunque algunas de ellas han sido producidas por diversos países, en la muestra se indica solo uno por filme.
Tommaso, de Abel Ferrara (Italia)
El cine de Abel Ferrara ha conducido las adicciones a través del arte, convirtiéndolas en el elemento central de este, de un modo tan puro como el que imaginó Zulueta en Arrebato o Herzog en su Nosferatu. La historia de Ferrara no se puede entender sin estos conceptos, que le llevaron (a él y a Dafoe) a recorrer las calles de Roma con Pasolini horas antes de ser asesinado. Ahora, Tommaso, su último personaje, parece vivir tras la muerte del genio italiano, en un estado constante de reflexión redentora a través de experiencias vitales del propio Ferrara. Allí, Tommaso se encuentra con bocetos de su próxima obra, mientras es juzgado por Pilatos en un sueño de Bulgákov.
Thalasso, de Guillaume Nicloux (Francia)
En un momento donde muchas películas son cortadas por un mismo patrón, evitando cualquier riesgo, para convertirse en un éxito comercial, hallamos un filme esencialmente libre. Nicloux, acompañado por Depardieu y Houellebecq, demuestra que, para hacer una gran obra, lo necesario es dejar hablar a los autores.
Monos, de Alejandro Landes (Colombia)
Hasta seis países se dan la mano para crear este retrato de guerrilleros, que convierte al espectador en una especie de documentalista, ansioso por saber más y por adentrarse en las mentes de los protagonistas; a pesar de que estos no tengan ninguna intención de dar extensos discursos frente a la cámara. Sencillamente actúan y viven como parte de ese hipnótico espacio natural en el que nos sumerge Alejandro Landes.
T-34, de Aleksei Sidorov (Rusia)
En agosto de este 2020 llegó por fin a nuestro país una de las principales obras bélicas producidas en Rusia. Con Aleksey Sidorov a los mandos, T-34 no es solo una épica batalla contra el nazismo, es también una obra compleja, con un guion excelente, que se toma en serio a sus personajes, desarrollando escenas de lucha como grandes coreografías dignas del mejor ballet.
Los consejos de Alice, de Nicolas Pariser (Bélgica)
La película política más importante de los últimos años. Poco más hay que decir de ella, esta primera frase debería rotular todo cartel o material promocional. Los consejos de Alice no solo no trata de quitarnos la esperanza en la gestión pública, sino que la valora tanto que exige la cultura y la filosofía como puntos indispensables para el buen hacer político. Porque sin leer a los pensadores que definieron (o trataron de definir) las características que componen, mueven y moderan a un ser humano, no se podrá legislar ni gobernar; todo será cortoplacista y superficial.
Bacurau, de Kleber Mendonça Filho y Juliano Dornelles (Brasil)
El futuro de Kleber Mendonça Filho y Juliano Dornelles no expone una distopía al uso, a pesar de que algunos elementos de la trama puedan hacernos pensar lo contrario. Bacurau es el nombre de un pueblo que ha desaparecido, no por una explosión nuclear o una catástrofe natural, sino simplemente porque ya no se muestra en los mapas. Nos recuerda un poco a todos esos lugares que nunca aparecen en informativos y debates, donde extranjeros de zonas con más suerte perpetran actos terribles contra ellos. Con el realismo mágico como arma contra la ignorancia, los autores construyen una obra mayor, que debería llevar a la ciudadanía a dejar de escuchar noticias patrocinadas por intereses perversos.
Longa noite, de Eloy Enciso (España)
Anxo regresa a su pueblo para adentrarse en una Galicia llena de traumas, heridas, oscuridad y remordimientos. Con las palabras de Max Aub, Luis Seoane, Alfonso Sastre, Ramón de Valenzuela o Rodolfo Fogwill; Eloy Enciso representa las dudas que nacen cuando el miedo toma el presente como rehén y comprendemos que tardará mucho tiempo en soltarlo.
El lago del ganso salvaje, de Diao Yinan (China)
Alcanzar una estética de verdadero cine negro no depende sombreros, gabardinas, cigarrillos y un mal imitador de Bogart, el cine negro representa un punto de vista concreto sobre la existencia. Eso que un día comprendieron en Hollywood, hoy parecen haberlo olvidado entre tanto superhéroe sinsorgo; así que hay que viajar hasta China para encontrar que el cine negro sigue vivo.
Los perros no llevan pantalones, de J-P Valkeapää (Finlandia)
Curar el dolor emocional con dolor físico. Bajo esta idea, J-P Valkeapää arma un provocador relato que, si bien es sencillo de seguir en lo que a trama se refiere, no lo es tanto al preguntarnos por las motivaciones de su protagonista. Se puede dar una respuesta básica que incluya términos como autodestrucción o arrepentimiento para quedarnos tranquilos. Sin embargo, sentimos que lo que se esconde es mucho más complicado. Solo al final, en una escena que no temo definir como perfecta, hallamos algo de lo que nuestro protagonista ha estado buscando. Aún y todo, vuelven a surgir más preguntas que respuestas, y eso es maravilloso.
Richard Jewell, de Clint Eastwood (EEUU)
Si bien todos conocemos las cualidades como director de Clint Eastwood, su nueva película le eleva quizá a uno de los puntos más altos de su carrera. Puede que esto sea un tópico, que al ver Mistic River o Infierno de cobardes se dijera lo mismo, pero creo justo señalarlo. La honestidad con la que Eastwood presenta a su protagonista, el modo en el que evita la conversión de Jewell en un héroe perfecto y el hecho de que no podamos estar de acuerdo con muchas de sus afirmaciones, hace que la propuesta gane complejidad y sea todavía más valiosa.
Casa ajena, de Remi Weekes (Reino Unido)
Hermanada intelectualmente con la australiana Babadook, Casa ajena representa un alarido para que se conozcan las historias de aquellos que jamás nos paramos a escuchar, y las tragedias que todavía se repiten en su mente.
11 películas, 10 países. Los consejos de Alice es francesa, no belga.
Muy interesante listado de películas para comparar el estilo de películas de diferentes países.
Algunas me han parecido muy interesantes.